El jengibre es una de esas plantas medicinales que siempre deberíamos tener a mano porque nos puede sacar de más de un apuro. El jengibre (Zingiber officinale) es una raíz (un rizoma) fácil de encontrar tanto fresco como en polvo o en cápsulas. Goza de gran popularidad en la medicina tradicional china y también en su cocina.
Remedio para mareos y náuseas
El jengibre es de gran utilidad para las embarazadas que padezcan náuseas, vómitos y mareos. Esta propiedad de paliar los mareos y náusea no sólo ayuda alas embarazadas, sino también en casos de mareos en viajes y en casos de pacientes de cáncer tratados con quimioterapia.
El jengibre (1 cápsula de 500 mg 2 veces al día) ha mostrado ser tan efectivo como el fármaco deminhidrinato en el tratamiento de las náuseas y vómitos durante el embarazo, pero con muchos menos efectos secundarios.
Jengibre para problemas estomacales y digestivos
En caso de indigestión una cápsula de jengibre ayudará a superar esa sensación de pesadez. En ocasiones, las infecciones víricas como la gripe afectan al estómago y a la salud intestinal. En estos casos el jengibre proporciona un efecto protector inapreciable, llegando incluso a evitar el vómito.
Entre sus propiedades está la estimulación biliar del hígado y de la vesícula, favoreciendo así la digestión de las grasas. El jengibre favorece la expulsión de los gases del tubo digestivo, deshinchando el abdomen.
Lo mismo nos puede suceder en caso de intoxicación alimentaria (salmonelosis), en cuyo caso el jengibre será de gran ayuda para el sistema digestivo.
Jengibre para resfriados
Diarrea, escalofríos y dolor de garganta son síntomas que nos deberían conducir inmediatamente a tomar una dosis de jengibre y seguir con él hasta que cesen los síntomas.
Jengibre y artritis
El jengibre es también un antiinflamatorio natural usado tradicionalmente para la artritis, especialmente como coadyuvante de otras plantas. Actúa inhibiendo la liberación de las prostaglandinas y otras sustancias que producen la inflamación y el dolor.
Jengibre para la salud cardiovascular
Otra cualidad del jengibre tiene aplicación sobre la salud cardiovascular, ya que inhibe la agregación de plaquetas, inhibiendo la formación de trombos, manteniendo la sangre fluida y previniendo el endurecimiento arterial. En pruebas con animales, el jengibre ha demostrado mejorar el bombeo del corazón.
Jengibre para la tos
El jengibre reduce la inflamación de los conductos bronquiales, disuelve la mucosidad y ayuda a eliminarla. El jengibre reduce la tos (de manera comparable a la codeína), aminora la ansiedad y tiene propiedades analgésicas. Posee propiedades antibacterianas contra algunos microbios que se trasmiten a través de los alimentos (Shigella, Escherichia coli y Salmonella).
Estudios sobre el jengibre
Estudios in vivo prueban que la raíz de jengibre protege a las ratas de daños en el cerebro y de trastornos de la memoria.
Estudios in vivo probaron que la raíz de jengibre incrementa los marcadores inmunológicos antes y después de las infecciones (el jengibre potencia el sistema inmunitario).
Varios ensayos mostraron la capacidad de desintoxicación que atesora el jengibre con los metales pesados, reduciendo los niveles y la toxicidad del cadmio. En estudios in vivo se ha comprobado que el jengibre reduce los efectos de los insecticidas organofosforados.
En varios estudios se ha observado que el jengibre disminuye la adherencia de las bacterias patógenas a la pared intestinal, reduciendo así la infección del tracto gastrointestinal. El jengibre también inhibe la elastasa, enzima que emplean muchas bacterias para descomponer el tejido celular y penetrar en el organismo.
Otros usos del jengibre.
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