Contraindicaciones y efectos secundarios de Mucuna pruriens
Mucuna pruriens o fríjol de terciopelo es una planta leguminosa de zonas tropicales como la India y el Caribe cuya semilla es una especie de haba.
En la composición de la semilla de Mucuna pruriens detaca especialmente una sustancia: la L-dopa. A esta sustancia, principalmente, se debe su aplicación medicinal al tratamiento de la enfermedad de Parkinson.
Las vellosidades de las semillas de Mucuna pruriens poseen histamina y pueden desencadenar reacciones alérgicas. Las flores y vainas, en contacto con la piel, pueden causar hinchazón y alergia. En algún caso, el contacto con la vaina de la planta puede causar eritema.
En un estudio de Shahaji y Parnu se administró a ratones una dosis de 2000 mg por Kilo de peso de extracto etanólico de la planta completa, sin que se produjera la muerte de los animales. La sustancia se considera de baja peligrosidad, con un valor de dosis letal media DL50 mayor que 2000 mg por Kg.
Otro estudio con ratones obtuvo para un extracto de hojas de Mucuna pruriens una dosis letal DL50 = 10000 mg por Kg. El estudio concluyó que el extracto de hojas por vía oral es prácticamente no tóxico (no se detectó toxicidad ni mortalidad).
Un estudio de Igbinaduwa y Anoh estudiaron la toxicidad oral aguda sobre ratones de extractos de hojas de Mucuna pruriens con dosis de hasta 8000 mg por Kg de peso corporal. La observación durante 14 días no mostró alteraciones de comportamiento ni muerte.
En el año 2010 se realizó un estudio con ratas a las que se suministró como alimento semillas de Mucuna pruriens durante 28 días. Los resultados del experimento (incremento de enzimas hepáticas y bilirrubina) sugieren que las semillas no deben utilizarse como alimento y que, se ser necesario, deben cocinarse previamente y comerse en pequeñas cantidades.
En el año 2013 Khan y otros estudiaron la toxicidad en conejos. Se les administró oralmente 70 mg por Kg de polvo de Mucuna pruriens durante 90 días. No se encontraron signos de toxicidad, mortalidad, ni variación de peso o parámetros hematológicos.
La administración de 30 g Mucuna pruriens en seres humanos con Parkinson, según un estudio de Katzenslager y otros, no produjo más efectos secundarios que nauseas en 2 pacientes. No hubo cambios detectados en los análisis. La dosis tóxica mínima de L-dopa en forma oral en seres humanos es de 4286 mg/Kg de peso.
Considerando los estudios de toxicidad realizados se puede concluir que las semillas de Mucuna pruriens presentan una toxicidad baja y su mayor riesgo se debe a su contenido en L-dopa.
Los efectos secundarios de la Mucuna pruriens más frecuentes son vómitos, nauseas, movimientos involuntarios, discinesias, distonías, pesadillas nocturnas, sueños vividos, alucinaciones, psicosis y similares. En ocasiones se ha producido taquicardia auricular, extrasístoles ventriculares por activación cardiaca e hipotensión postural (bajada de tensión al incorporarse de la posición tumbada o al cambiar de postura).
Según un estudio efectuado con ratas, a dosis de 32 mg/Kg se presentaron efectos secundarios una hora después de la ingesta, como hiperventilación, actividad motora espontánea reducida y erecciones espontáneas.
La Mucuna pruriens puede presentar contraindicaciones si se están tomando medicamentos. Si se están tomando IMAO (inhibidores de la monoaminooxidasa), la Mucuna puede aumentar la presión arterial. Puede ser necesario tomar suplementos de vitamina B ya que la ingesta de esta planta puede aumentar su necesidad. Su ingesta puede potenciar el efecto de los anticoagulantes, de los medicamentos contra el Parkinson y de los fármacos antidiabéticos.
No se recomienda su uso en caso de embarazo por falta de estudios en estos casos.
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